viernes, 26 de diciembre de 2008

Què es Delincuencia

Para la pàgina web http://members.tripod.com/~beatrizt/verdad/violencia.html la delincuencia, conjunto de infracciones de fuerte incidencia social cometidas contra el orden público. Esta definición permite distinguir entre delincuencia (cuyo estudio, a partir de una definición dada de legalidad, considera la frecuencia y la naturaleza de los delitos cometidos) y criminología (que considera la personalidad, las motivaciones y las capacidades de reinserción del delincuente).

Definición de Delincuencia Juvenil

Delincuencia, conjunto de infracciones de fuerte incidencia social cometidas contra el orden público. Esta definición permite distinguir entre delincuencia (cuyo estudio, a partir de una definición dada de legalidad, considera la frecuencia y la naturaleza de los delitos cometidos) y criminología (que considera la personalidad, las motivaciones y las capacidades de reinserción del delincuente).

Visto el concepto de delincuencia, resulta necesario delimitar el adjetivo de juvenil, es decir, ¿cuándo la delincuencia es juvenil? Vaya por delante que no podemos emplear al objeto de este trabajo el significado etimológico de tal adjetivo, pues desde este punto de vista, quiere decir lo relacionado con la juventud. Y no es aplicable, decimos, este concepto etimológico, porque dentro del campo de las ciencias penales viene entendiéndose por delincuencia juvenil la llevada a cabo por personas que no han alcanzado aún la mayoría de edad , mayoría de edad evidentemente pena.
Sin lugar a dudas, la delincuencia juvenil es un fenómeno muy representativo desde el siglo pasado, la delincuencia juvenil es uno de los problemas criminológicos que crece cada día más, no solo en nuestro país, sino también en el mundo entero; es una de las acciones socialmente negativas que va a lo contrario fijado por la ley y a las buenas costumbres creadas y aceptadas por la sociedad.

Es un fenómeno social que pone en riesgo la seguridad pública de la sociedad, así mismo va contra las buenas costumbres ya establecidas por la sociedad.

La delincuencia juvenil es un fenómeno de ámbito mundial, pues se extiende desde los rincones más alejados de la ciudad industrializada hasta los suburbios de las grandes ciudades, desde las familias ricas o acomodadas hasta las más pobres, es un problema que se da en todas las capas sociales y en cualquier rincón de nuestra civilización.

lunes, 22 de diciembre de 2008

Indices de delincuencia en Quito




· Entre enero y julio se presentaron 2.303 denuncias de robos a casas, departamentos y estudiantes universitarios, con un promedio de $5 000 en pérdidas, lo que significa un total de $11 515 000.
· La Policía detuvo a 1.869 presuntos delincuentes en lo que va de 2008, lo que representa el 15% del total de detenidos. Mientras que en Guayas se superó el 30%.
· Solo en julio se recibieron 2.470 denuncias en Pichincha, lo que significa el 31% del país.


También se detuvo a 253 personas por varias causas, en especial por robos.
Ahora los delitos se cometen con asesinatos y se causa daño a la integridad de las personas, a pesar de que éstas reaccionan pasivamente frente las amenazas.
Guayaquil es la ciudad que lleva la delantera en lo que se refiere a delitos acompañados de la violencia y agresividad.

En el primer mes de este año se registraron 33 muertes en hechos violentos durante los asaltos y robos de autos y domicilios.

La delincuencia y sus expresiones violentas se explican, muchas veces, por el cuadro social. Casos como el de robos a jóvenes universitarios se dan a diario, esto ocurren en las grandes urbes del país y expresan cómo la marginación destruye el tejido social y genera condiciones para el delito.


El fenómeno de la violencia juvenil ha venido creciendo al compás del deterioro de la situación económica de todo el país. La gran mayoría de los asaltantes son personas sin trabajo, que recurren a la delincuencia para llevar un pan de comida a sus hogares. Procedentes de familias numerosas, pauperizadas, que viven hacinadas, con padres desocupados o con empleos precarios, se encuentran excluidos del mundo laboral y educacional y, por ende, de toda posibilidad de inserción social.


Está claro que la pobreza no es sinónimo de delincuencia. De hecho, la mayoría de los pobres no cometen delitos. Pero lo que están padeciendo en la actualidad muchos sectores no es sólo la falta de recursos presentes, sino la ausencia de proyectos que permitan vislumbrar un futuro mejor.


La certeza de que los hijos estarán igual o peor que los padres, que estarán signados por la lisa y llana exclusión, puede producir efectos más devastadores que las carencias materiales mismas.


Si bien el delito no puede ser justificable, resulta imprescindible entender que no es sólo cuestión de aumentar la protección para brindar seguridad, sino que hacen falta medidas más profundas de contención social para incluir a los sectores más débiles y desguarnecidos. Porque es poco lo que la represión podrá conseguir frente a legiones de personas sin trabajo, sin escuelas, sin futuro, cargados de frustración y librados a su propia suerte.

viernes, 12 de diciembre de 2008

EL MIEDO DE LOS ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS CRECE EN LAS CALLES DE QUITO

Uno de los principales síntomas de que una sociedad atraviesa una crisis, tanto económica como social, es el crecimiento de la delincuencia en las calles. Esto es tan solo el resultado de la mala distribución de los recursos, la concentración de poderes y las escasas oportunidades con las que muchos ecuatorianos cuentan para progresar.

La inseguridad en las calles del distrito metropolitano cada día es más evidente, a plena luz del día y frente a los ojos de águilas y de los quiteños ocurren asaltos, robos y atracos, la imposibilidad de defenderse frente a ellos y de socorrer a quien necesita por temor a ser lastimados se ha convertido en la nueva tradición de la capital.
Uno de los blancos preferidos por los antisociales son las Universidades, por la constante circulación de estudiantes, transeúntes y profesores que por lo menos tienen una calculadora de la cual los ladrones pueden sacar provecho. El robo de celulares, de i pods y billeteras ya no es suficiente, asaltos a mano armada, robo de radios, llantas de emergencia e incluso de autos son la especialidad del día.

La nueva ubicación de la Universidad de las Américas ha contribuido con el acelerado crecimiento de los robos, la avenida 6 de diciembre y Granados, a pesar de ser una de las más concurridas, es también uno de los sitios favoritos de los asaltantes, ya que la mayoría de los estudiantes de la UDLA se ven obligados a tomar la Ecovía.
El lunes de esta semana saliendo de la clase de marketing, Kevin Vanegas, estudiante de Periodismo (UDLA) fue sorprendido en el semáforo por dos personas que con un arma de fuego y groseras amenazas lo obligaron a abandonar su auto: ¨Fue en cuestión de segundos, hacia calor, a nadie se le ocurriría ir con los vidrios cerrados, es increíble que a metros de tu universidad sufras este tipo de atropellos¨.

Los guardias del Centro Comercial Granados afirman que ellos no han visto nada sospechoso, que con la presencia de los policías que están encargados del tráfico vehicular de la mañanas esta todo bajo control, sin embargo los estudiantes cada día tienen un robo nuevo que contar.

En la Católica uno de los principales factores para que sus estudiantes sean victimas de robos son los horarios, debido a que esta universidad abre sus puertas desde las siete de la mañana hasta casi las diez de la noche y que los guardias de seguridad no cumplen con su verdadera función ya que semanas atrás llevados por sus ideologías racistas golpearon a un estudiante negro de la universidad confundiéndolo con un ladrón este hecho indigno a toda la ciudad, en especial a los estudiantes de la PUCE que a pesar de casi nunca ser participes de protestas se levantaron por la defensa de los derechos humanos y solidaridad con su compañero.

La parada del víngala por su poca iluminación y la relativa distancia de la universidad, es otro blanco para los asaltos, Camila Almeida, estudiante de derecho de la Católica, afirma que hace menos de un mes caminando hacia la parada de buses para dirigirse al Valle de los Chillos le arrebataron bruscamente su mochila.

La Universidad Tecnológica Equinoccial (UTE) sufre los mismos estragos de las universidades antes mencionadas, a sus alrededores existen varios centros donde sus estudiantes se concentran, Verónica Suárez estudiante de Hotelería y Turismo también fue victima de los delincuentes, salía de un bar con dos amigas y se dirigía a su última clase cuando dos mujeres de aproximadamente unos 30 años de edad le quitaron la laptop y salieron corriendo a toda prisa.

Quejas y denuncias van y vienen, los estudiantes no se sienten seguros ni protegidos de ninguna manera, los padres de familia temen por la seguridad de sus hijos, las autoridades deben tomar medidas en el asunto, puesto que ellos deben velar por la integridad de sus alumnos, afirma Alexandra Aroca, madre de familia.